El principal destino del beau monde, Ibiza ha mantenido su reputación entusiasta, así como su atractivo natural. Las élites con piel bronceada participan en brillantes veladas, los grandes nombres de la industria musical dominan los tocadiscos de los clubes icónicos, mientras que los mares azules proporcionan un escenario inolvidable. Los yates de lujo atracan en las aguas cristalinas y los ricos y famosos asisten a eventos de alto nivel.

Después de sumergirse en las tardes iluminadas con neón, a sólo 30 minutos de navegación se encuentra el oasis de arena blanca de Formentera para disfrutar de largos tramos de playa y prepararse para los mimos en la más pequeña de las islas Baleares. Deje que el mundo le pase por delante tan perezoso en la cálida arena como sorba en su Piña Colada y absorba las vistas celestiales.

Ibiza y Formentera son dos contrastes maravillosamente unidos, una oportunidad para cautivar con el torbellino de la música salvaje de los grandes nombres de la industria, luego relajarse haciendo yoga y meditando, olvidarse de los estresantes de la vida cotidiana y disfrutar de las mejores vacaciones que el mundo tiene para ofrecer.

IBIZA

Venga a la Isla Blanca y eche el ancla aquí para descubrir por qué es uno de los lugares más famosos para ir de fiesta. Al norte de Port Ibiza encontrará Marina Ibiza, donde se encuentran algunos de los yates más lujosos. Marina Ibiza es una opción igualmente popular entre los visitantes de la alta sociedad, ya que ambos puertos deportivos están rodeados de famosos (o infames) clubes, numerosos bares y restaurantes, así como boutiques de lujo.

Para disfrutar de una experiencia que difícilmente encontrará en ningún otro lugar, acuda al restaurante Sublimotion, donde el chef Paco Roncero, pionero de la gastronomía molecular, cuyas habilidades están confirmadas por la merecida categoría Michelin, prepara deliciosos platos mientras los invitados disfrutan de un espectáculo gastronómico enriquecido con elementos de realidad virtual, espectáculos de luz láser y cartografía de proyección. Las bebidas se mezclan mágicamente y los platos caen del techo, los postres se colocan dentro de globos, para asegurar que los visitantes tengan una aventura verdaderamente sin igual en el restaurante más caro del mundo.

Elevándose majestuosamente 400 metros por encima del mar, se encuentra la seductora roca de Es Vedra. Navegue para admirar uno de los monumentos más famosos de Ibiza y disfrute de la impresionante vista desde la cubierta de su barco y mire el mar de colores del atardecer - no le sorprenderá que el lugar sea supuestamente el lugar de nacimiento del mito de las sirenas griegas, cuyos cantos atraían a los marineros a la muerte provocando su naufragio.

Los hedonistas se verán abrumados por la elección a la hora de decidir dónde pasar sus tardes, pero muchos olvidan cómo la impresionante isla obtuvo por primera vez su decadente reputación.

Todo comenzó en el siglo VII a.C. cuando los fenicios le dieron a la isla el nombre de Iboshim para honrar al dios de la danza y la música Bes. Más tarde, la isla que fue gobernada por los cartujos, romanos y moros se convertirá en un refugio para bohemios, artistas y hippies.

Llena de estrellas del rock, después de que el playboy internacional Tony Pikes comenzara a dirigir un hotel aquí, gente como Freddie Mercury, Eric Clapton y George Harrison convirtieron el pequeño oasis balear en la capital de la decadencia.

A mediados de los setenta, un joven filósofo Antonio Escohotado fundó el club "Taller del Olvido" - que más tarde se rebautizó con lo que aún se conoce como el icónico club "Amnesia". Cuarenta años más tarde, los A-listers vienen al lugar de nacimiento del "Balearic beat" para bailar toda la noche mientras disfrutan de la música de los DJs más influyentes del mundo.

Privilege es un club cuyos anfitriones incluyen a Madonna y Mick Jagger y es el hogar de la pista de baile más grande del mundo, pero a veces puede sentirse un poco abarrotado. Space, Es Paradis Terrenal y Pacha son otras de las mejores opciones para practicar tus movimientos en la atmósfera amante de la diversión de Ibiza.

Después de despertarse con un dolor muscular adquirido por el baile, asegúrese de desintoxicarse con zumos orgánicos naturales en el lugar de Ibiza llamado Potions. Los zumos pueden ser entregados directamente a su yate para reponer fuerzas para otra noche de fiesta.

Compre su próximo traje de noche en la variedad de prendas bohemias, cuidadosamente seleccionadas, en la elegante tienda conceptual Galeria Elefante. Situada en una granja encalada de 400 años de antigüedad de Santa Gertrudis, la tienda ofrece piezas de todo el mundo y es un lugar perfecto para buscar tu próxima joya vintage.

Aguas Blancas es una playa adorada por los lugareños, pero en realidad tendrá que caminar a través de un bosque para llegar a ella. La caminata vale la pena, ya que encontrará un increíble y dramático escenario formado por mares nacarados y altos acantilados, complementado por arena dorada y es conocido por sus impresionantes olas, perfectas para el amante del surf.

Vaya a la playa de Benirras, una colmena de la multitud zen, para disfrutar del ambiente hippie y de las aguas cristalinas. Cada domingo, un ritual icónico tiene lugar en la playa donde los hippies y los bohemios "tocan el tambor de la puesta de sol". La tradición comenzó en 1991 como una protesta contra la guerra en el primer Golf de Iraq, pero desde entonces se ha convertido en un hermoso evento de tambores que se celebra semanalmente.

Para una experiencia de lujo por excelencia, diríjase a Calla Mastella. Una de las playas más pequeñas de la isla es una pequeña cala impresionante abrazada por bosques de pinos y acantilados rocosos. Aquí encontrará un impresionante restaurante de mariscos, El Bigotes, donde incluso el Rey de España fue rechazado una vez por no reservar una mesa con antelación.

Ahora quítese los zapatos de fiesta, ya que todos sabemos que no se permite el calzado a bordo, y prepárese para relajarse en la hermana pequeña de Ibiza.

FORMENTERA

La antítesis de la movida vida nocturna de Ibiza, Formentera le encantará con playas aparentemente interminables, un ambiente relajado y belleza natural. El lugar donde los salvajes vienen en busca de paz, Formentera tiene alguna que otra discoteca aquí y allá y ofrece sólo dos puertos deportivos, uno de los cuales, Marina de Formentera.

Las playas de arena fueron adoradas por los hippies en su día - Joni Mitchel escribió su álbum Blue mientras descansaba en la isla, mientras que Bob Dylan incluso vivió en el faro de Cap de Barbaria. Aún hoy en día, el impresionante oasis mantiene el ambiente relajado y el estilo de vida bohemio de su apogeo en los 60.

Se podría decir que la falta de acción es la mayor atracción de Formentera. Los días se desvían en una neblina de sol y natación, pero la pequeña isla tiene mucho que ofrecer.

Platja Illetes

Lo más cercano al Caribe que se puede encontrar en Europa, la playa más emblemática de Formentera suele ser el primer oasis marino que la gente descubre después de venir a curar su resaca inducida por Ibiza.

Situada en el Parque Natural de Ses Salines de Elvissa y Formentera, esta playa tiene más de 450 metros de arena blanca y suave dividida en dos por un pequeño pasadizo rocoso. Un paisaje paradisíaco y una atmósfera relajada son simplemente una clase magistral para reconocer los diferentes tonos de azul. Juan y Andrea es el restaurante más emblemático de la idílica playa. Lo que comenzó como un humilde chiringuito en 1971 por un pescador local que servía su captura diaria de pescado es ahora una meca para los conocedores gourmet.

La Savina

El muelle más pequeño de la isla pitusiana es el lugar donde se puede observar el ajetreo de los ferries y yates de lujo que llegan y salen. Desde aquí se puede acceder fácilmente a todas las partes de la isla - la mencionada playa de Illetes y la Playa Levante están ambas muy cerca.

Paseando por el puerto, descubrirá muchos bares, cafeterías y tiendas vibrantes.

Cala Saona

Una de las playas más impresionantes de la isla ofrece unas vistas idílicas de las tres cosas más importantes de la vida: la arena, el mar y el cielo. Situada entre dos acantilados rocosos, Cala Saona es un paraíso de aguas tranquilas y brillantes - Ibiza se puede ver desde la distancia mientras se broncea y bebe mojitos.